No todo el mundo tiene la oportunidad de acudir a un evento deportivo de primer nivel. Bien sea el Mundial de Fútbol, una final de Champions League o la Copa del Mundo de Baloncesto, son pocos los afortunados que pueden asistir en directo. Las organizaciones de eventos deportivos, sus patrocinadores e instituciones son conscientes de esto y desde hace unos años han decidido llevar el espectáculo a los centros de las grandes ciudades creando lo que se conoce como fan zone.
Las pantallas LED gigantes, eje de las fan zone
El objetivo de estos espacios es simple, agrupar y controlar a una multitud en un gran espacio abierto para que anime a su equipo desde la distancia o el exterior del estadio y apoyar acciones publicitarias de los patrocinadores. El elemento principal de estas fan zone son pantallas LED gigantes. Alrededor de ellas gira toda la actividad que genera esta área preparada para los seguidores más fanáticos. Gracias a la calidad de imagen y a la versatilidad a la hora de configurar el tamaño de las pantallas LED gigantes, ver un partido de fútbol en una de estas fan zone es lo más parecido a estar en el mismo estadio.
Los formatos gigantes de pantallas LED pueden superar los 100 metros cuadrados y hacen que no importe la extensión de la zona de fans. En grandes espacios abiertos como plazas o parques el área no es un obstáculo a la hora de instalar una pantalla en la que el partido se vea con una buena calidad. Además, estas pantallas son el soporte ideal para insertar publicidad en los previos y en los descansos de los partidos y comunicar información útil a las miles de personas que se concentrar en torno a las pantallas.
Las pantallas LED gigantes se han convertido en un elemento imprescindible para este tipo de actos y ya no se entiende la organización de un acontecimiento deportivo sin la presencia de las fan zone y las pantallas gigantes. De hecho, en muchas fan zone se ha conseguido congregar a más espectadores que en cualquier gran estadio.
Una forma única de sacar de los estadios la emoción y la pasión de un evento deportivo de primer nivel.